La instalación de fuentes en casa ayudará a que nuestro hogar ofrezca una sensación de sosiego y tranquilidad, a crear un espacio lleno de armonía. Debemos buscar la fuente que más encaje en nuestro entorno, el sonido del agua ayudará a tranquilizarnos.
Últimamente se ha comenzado a popularizar el uso de pequeñas fuentes como elemento armonizador. ¿Para qué sirven? Como Uds. ya se habrán dado cuenta, nosotros evitamos las explicaciones del tipo “las fuentes traen energía positiva y buena suerte” o “una fuente en el área de la fortuna hará fluir el dinero” etc., sino que tratamos de ir un poquito más allá.Las fuentes aportan básicamente dos cosas: un sonido placentero (si están bien hechas, de lo contrario es como si perdiera una canilla) y equilibrio iónico del aire.Lo primero (el aporte de sonido) no requiere mayores explicaciones, pero ¿qué es el equilibrio iónico del aire? El aire que respiramos está cargado de iones, es decir, partículas con carga eléctrica que puede ser positiva (+) o negativa (-). Las cargas (+) predominan en esos días “pesados” y nos hacen sentir cansados, mientras que las cargas (-) predominan en el aire de alta montaña o después de una tormenta, nos hacen sentir frescos y animados. Las gotitas que se desprenden de una fuente capturan iones (+), por lo tanto, hacen aumentar la proporción de iones (-) en el aire y lo tornan más fresco, haciéndonos sentir mejor.
Antes de adquirir una fuentecita de mesa asegúrese que la bomba que utiliza sea de buena calidad y silenciosa: una bomba de mala calidad se reconoce porque al funcionar emite un zumbido, que aunque al principio parezca leve a la larga será insoportable, y arruinará la fuente por más linda que pueda ser estéticamente.
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